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Vigan, antigua ciudad colonial española en Filipinas.

Vigán, la ciudad filipina Patrimonio de la Humanidad.

Vigán, visita a una de las últimas ciudades coloniales españolas

 

La presencia de un carruaje en la calle donde está situado mi hotel, me indica que he llegado a Vigán, una de las ciudades filipinas con más historia. Seguramente por ello, la Unesco decidió incluirla en su lista de ciudades Patrimonio de la Humanidad, allá por el año 1.999. En Vigán, nos encontramos una mezcla atrevida de elementos europeos y asiáticos, y una cuidada arquitectura colonial española, que ha perdurado hasta la actualidad.

No es que sea muy grande, la calle Crisófolo concentra la mayoría de tiendas y de casas coloniales, pero se nota nuestra presencia en todas las calles, de nombre español. Allí, se encuentra el museo Crisófolo, que fue el que visité, y la verdad, valió la pena. Calle Crisólogo, Vigán Calle Crisólogo, Vigán

 

En la hora de la siesta de Vigán, Filipinas

 

 

Un dato curioso, he pasado por dos iglesias y no las he podido ver, ya que era hora de misa de domingo, y estaban hasta fuera oyendo la misa. Los cantos los hacen en inglés, no en su dialecto (aquí, cada zona tiene un dialecto propio, además del lenguaje común que utilizan en el colegio, y el inglés; el español se impartió hasta los años 70).

 

Iglesia los domingos en VIgán

 

Situada frente al Mar de la China Oriental, en la provincia de Ilocos Sur, se considera la ciudad colonial mejor preservada de toda Asia. La ciudad nació de un grupo de comerciantes de la cercana China, concretamente, de Fujián. Éstas gentes, dejaron su idioma, el fukienés, en la zona, de donde “Bigan” significaba tierra hermosa, ya que la zona tiene unas playas preciosas. Como si hay algo que los españoles nunca hemos hecho es diferenciar la “V” de la “B”, la llegada de los colonizadores dejó el nombre en Vigán, y así se quedó hasta el día de hoy. Como las conquistas siempre lo cambian todo, los colonizadores también le cambiaron el nombre a la ciudad en un principio, nombrándola Villa Fernandina (qué cursi), ya que el rey Felipe II acababa de ser padre, y había que honrarle de algún modo. Más tarde, la ciudad creció, y su nombre también se hizo más largo: Ciudad Fernandina de Vigán.

 

Museo de Vigán.

 

Parte interior de la Iglesia en Vigán, al fin! pude entrar para comprobar lo que se parece a cualquier iglesia española… Parte interior de la Iglesia.

La presencia española se da la mano con la religión. La presencia española se da la mano con la religión, no en vano, ocuparon Vigan desde el 1565 hasta 1898, con la llegada de los americanos.

 

Calles de Vigán

 

Estar aquí, es como transportarte a una época pasada, como estar en una de esas películas que se desarrollan en la época colonial, solo que aquí es real. Los personajes, en este caso, son reales, y todo el decorado también.

 

Vigan, antigua ciudad colonial española en Filipinas.

 

 

Me ha gustado, y mucho esta ciudad. Conserva el encanto del pasado. Llegar hasta aquí ha sido bastante complicado (dos autobuses, que enlacé en medio de la carretera porque era el punto de encuentro. Me tuve que quedar en medio de la nada media hora, sin estar segura de si pasaría o no, solo había uno al día), pero ha merecido la pena. 

 

 

Rose

Cuando empecé a viajar, hacía ya mucho tiempo que quería hacerlo, pero no sabía cómo ni cuándo. Solamente un pequeño empujón hacia Laos, y mi destino estaba claro: mi vida era viajar… con el tiempo, me he dado cuenta de nada te aporta tanto, te enseña tanta humanidad y te otorga tanta comprensión, como el viajar. Cada viaje te acerca a una cultura y personas distintas, pero que al final, son tan humanos como tú. Los viajes son una lección de vida, así que cuando empieces, no volverás a ser la misma persona, no lo olvides…

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