Nuestro primer día, pasó volando, simplemente organizando la ruta, y haciendo tiempo hasta nuestro tren nocturno, que salía a las 12 am de la noche. Solamente nos dio tiempo de visitar el Fuerte Rojo (creo que todas las ciudades de la India tienen su fuerte rojo), antes de partir a Vanarasi esa noche. Hoy en día, no sé si habrá cambiado mucho la India, pero ese primer día, ya pudimos percibir la diferencia de castas (es muy chocante el ver a niños limpiando los trenes, simplemente porque son de la casta inferior), o también cantidad de pobreza allí reinante. Como todas las capitales, siempre se ve más gente pidiendo en la calle, pero en Delhi, todavía choca más. Ya allí, pudimos ver a sus vacas sagradas por la calle, donde son las reinas soberanas de todo a su alrededor. Curioso al menos, lo es.
Impactos: 113